La firma del acuerdo comercial entre la Unión Europea y Mercosur este sábado en Brasil enfrenta serias dudas. Francia y Polonia han endurecido su oposición al pacto, mientras el Parlamento Europeo vota hoy sobre salvaguardas reforzadas para el tratado. La posición de Italia se considera clave para el destino del acuerdo.
El ministro de Economía y Finanzas francés, Roland Lescure, dejó clara la postura de su país el domingo en Les Echos: «Para nosotros, este tratado es inaceptable en su forma actual.» Francia solicitó posponer la ratificación hasta principios del próximo año. Polonia se posicionó abiertamente en contra de la firma del acuerdo.
Las tensiones se intensifican con las protestas de agricultores en Francia y manifestaciones agrarias programadas en Bruselas el jueves, vinculadas directamente al pacto transatlántico. Las salvaguardas que vota hoy el Parlamento Europeo pretenden abordar precisamente las preocupaciones del sector agrícola.
Importancia geopolítica
El portavoz de Comercio de la Comisión Europea, Olof Gill, defendió ayer la trascendencia del acuerdo: «Estamos hablando de unir dos de los bloques comerciales más grandes del mundo. Y al hacerlo, en un momento de creciente incertidumbre geopolítica, creamos una plataforma basada en la confianza, basada en reglas, donde podemos trabajar con Mercosur en los grandes desafíos a nivel global de nuestro tiempo.» Calificó el tratado como «de una importancia crucial desde el punto de vista económico, diplomático y geopolítico».
El acuerdo uniría a 500 millones de consumidores europeos con 270 millones del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay). El pacto prevé el desmantelamiento de aranceles durante los próximos 15 años: el 93% para exportaciones de la UE y el 82% para importaciones agroalimentarias del Mercosur. Además, aseguraría acceso privilegiado a tierras raras del bloque sudamericano, reduciendo la dependencia europea de China.
España defiende, Italia decide
España se posiciona como firme defensora del pacto comercial. El Ministerio de Economía español estima que las exportaciones de vino y aceite de oliva aumentarían más del 50%. La posición aún indefinida de Italia se considera ahora pivotal para el resultado final del acuerdo.
El comisario de Comercio, Maros Sefcovic, advirtió ayer sobre las consecuencias de las demoras: «Creo que se trata de la credibilidad y la previsibilidad de la UE. En Europa, a menudo hablamos de la necesidad de ser estratégicos. Hay que tomar una decisión estratégica.» Sefcovic alertó que los retrasos podrían llevar a los socios del Mercosur a abandonar las aspiraciones de alianza.
25 años de negociaciones
Las negociaciones comenzaron hace 25 años. Fuentes diplomáticas reflexionaron sobre el prolongado proceso cuatro días antes de la firma prevista: «Llegué a la carrera diplomática cuando se inició la negociación del acuerdo comercial con Mercosur y, 25 años después, es algo a lo que se le sigue dando muchas vueltas y que no está nada claro.»
La Comisión Europea presentó el texto definitivo del acuerdo en septiembre, incluyendo salvaguardas para prevenir un bloqueo histórico francés. La ratificación en el Consejo de la UE requiere una mayoría cualificada basada en el número de países y el 65% de la población del bloque. Una minoría de bloqueo sigue siendo una preocupación.
Nota: Este artículo fue creado con Inteligencia Artificial (IA).






