El Gobierno de Israel ha anunciado este miércoles que continuará bombardeando las fuerzas gubernamentales sirias hasta que se retiren de la ciudad de Sueida, en el sur del país. La decisión llega tras la irrupción de tropas sirias en la localidad el martes, después de varios días de intensos combates entre milicianos drusos y beduinos.
"El régimen sirio debe dejar tranquilos a los drusos en Sueida y retirar sus fuerzas", declaró el ministro de Defensa israelí, Israel Katz. El responsable subrayó que Israel "no abandonará a los drusos en Siria" y aplicará una política de desmilitarización en la zona fronteriza.
Israel intensifica su respuesta militar
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) mantendrán sus ataques contra las fuerzas del régimen sirio hasta lograr su retirada de la zona, según advirtió Katz. El ministro amenazó con intensificar la respuesta israelí si Damasco no comprende el mensaje.
Los nuevos enfrentamientos han estallado en Sueida pese al alto el fuego anunciado el martes por el Gobierno sirio tras dos días de combates. Los choques han dejado un balance devastador de aproximadamente 260 muertos, según el último recuento del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Damasco justifica su intervención militar
El Ministerio de Defensa sirio confirmó este miércoles que "grupos ilegales han reiniciado sus ataques contra el Ejército y las fuerzas de seguridad interna" dentro de la ciudad. Las autoridades sirias aseguran que sus fuerzas "responden a fuentes de disparos" y trabajan para "proteger a los residentes".
El departamento pidió a los habitantes que permanezcan en sus hogares e informen sobre la presencia de grupos armados ilegales. "Hemos confirmado en comunicados previos el derecho de las fuerzas militares a responder a las fuentes de disparos", justificó la cartera.
Balance devastador de víctimas civiles
El Observatorio Sirio ha confirmado la muerte de cerca de 110 drusos, incluyendo cuatro niños y 22 personas que fueron "ejecutadas" por las tropas gubernamentales. Las fuerzas sirias han sufrido aproximadamente 140 bajas, mientras que 18 milicianos beduinos también han perdido la vida.
Las nuevas autoridades sirias, instauradas tras la caída del régimen de Bashar al Assad en diciembre de 2024, enfrentan diversos problemas de seguridad con tintes sectarios. La situación pone a prueba las promesas de estabilización del nuevo presidente de transición Ahmed al Shara, anteriormente conocido como Abú Mohamed al Golani y antiguo líder del grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS).
(EUROPA PRESS) Nota: Este artículo ha sido editado con la ayuda de Inteligencia Artificial.