El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha vetado aproximadamente una sexta parte de los artículos de una controvertida ley aprobada por el Congreso para flexibilizar la concesión de permisos ambientales. La norma busca facilitar los trámites para empresas involucradas en proyectos de infraestructuras.
Lula ha promulgado la ley pero con vetos en 63 de sus 400 apartados, con el objetivo de garantizar la "protección ambiental" y la "seguridad jurídica", según ha explicado la Presidencia. El Congreso brasileño aún puede sacar adelante el borrador inicial si logra reunir una mayoría absoluta.
Vetos a declaraciones empresariales
Entre las partes rechazadas por el mandatario figura una nueva vía que habría permitido el inicio de obras con una mera declaración de las empresas sobre el potencial impacto ambiental. Esta medida habría eliminado la necesidad de un permiso específico previo de las autoridades competentes.
Además, Lula ha vetado también los límites a las consultas a comunidades indígenas establecidos en la ley original. El presidente también rechazó una potencial reducción de la protección del bosque atlántico, argumentando que este bioma se encuentra ya en situación "crítica", según informa la Agencia Brasil.
Críticas del sector ecologista
La ley había generado fuertes críticas por parte del Ministerio de Medio Ambiente y de las organizaciones ecologistas brasileñas. Estos sectores consideraban excesivas las concesiones contempladas en este Proyecto de Ley de Licencias Ambientales.
Por el contrario, el sector agrícola había aplaudido la iniciativa legislativa, que veía como una oportunidad para agilizar los procesos burocráticos. La medida refleja la tensión constante en Brasil entre el desarrollo económico y la protección del medio ambiente.
(EUROPA PRESS) Nota: Este artículo ha sido editado con la ayuda de Inteligencia Artificial.